Un manipulador es, por su propia definición, alguien que se aprovecha de otros y de sus buenas intenciones para conseguir sus objetivos particulares. Esto nos indica lo complicado que puede ser percatarse de ello, pues son capaces de envolver la realidad en un lazo precioso para que las víctimas lo den todo sin sentir que algo va mal.
En algunas ocasiones es más sencillo darse cuenta de lo que está pasando desde fuera, cuando una amistad o un familiar está siendo claramente manipulado. Es una circunstancia complicada, ya que abrir los ojos a una persona que ha sido embaucada puede ser difícil: lo negará inicialmente y, según cómo se diga, podemos ofenderla.
Entonces, ¿cómo debemos actuar?, ¿cuál es la mejor forma de abrir los ojos a alguien que se encuentra en esta situación? En este artículo te explicamos cómo detectar la manipulación, cómo es este proceso y qué puedes hacer para abrir los ojos a alguien que es víctima de un tercero.
¿Cómo saber que alguien está siendo manipulado?
Antes de intervenir de ninguna manera, lo mejor es asegurarse de que las sospechas que tienes son reales. Para ello debes observar a esa persona que te preocupa y determinar que realmente está siendo manipulada por un tercero.
El primer síntoma suele ser un cambio de actitud en general o en su comportamiento. La persona que es manipulada está sintiendo una gran presión, aunque no sea capaz de reconocerla, y abandonará determinados hábitos a conveniencia del otro. Puede dejar de salir a cenar con sus amistades, quedarse en casa los fines de semana cuando antes salía a hacer actividades o abandonar una afición.
Cuando la influencia es muy intensa y el manipulador ha trabajado bien su terreno, se verán otros indicios. Es común que vea el teléfono móvil con cierta asiduidad o que, en general, esté pendiente de las comunicaciones con esta persona constantemente. Hay alguien que está dominando su comportamiento y moviendo los hilos, cuando antes era independiente. Puede que, incluso, ante la toma de una decisión que antes solventaría sin problemas, ahora decida consultarla con esta persona antes de dar una respuesta.
Lo que puedes hacer para abrir los ojos a alguien manipulado
Al notar estos cambios en una persona que aprecias y ver que las cosas no van bien es normal que te preocupes. Por desgracia, hablar con claridad sobre este tema puede ser complicado porque se puede sentir atacada y hacer que su relación contigo se deteriore todavía más. Sin embargo, algunas actuaciones pueden ayudar a que abra los ojos con algo más de sutileza.
Estas son algunas de las cosas que puedes hacer al respecto:
- Identifica las técnicas de manipulación: conocer la forma de operar e identificar las debilidades de un manipulador, puede ser oro para abrir los ojos a alguien. Con esta información puedes tener una conversación que no sea ofensiva y que se base en los hechos, mostrando acciones concretas que está haciendo para persuadirla. Al conocer sus puntos débiles puedes dar armas a la víctima para que desenmascare su comportamiento y que se confirme aquello de lo que tú estás alertando.
- Apoyo externo: es común que la persona manipulada se sienta bastante sola en esos momentos. Enfadarse y dejar de hablar con ella no es la mejor opción para que abra los ojos, pues al final quedará en manos del manipulador. Seguir a su lado va a potenciar vuestra confianza y te dará la oportunidad de ofrecer ayuda cuando te insinúe que alguna actitud del manipulador no está siendo correcta, de hecho, puedes tener más oportunidades de abrirle los ojos.
- Refuerzo en la confianza: reforzar la confianza de una persona que está siendo manipulada puede ser clave para que empiece a darse cuenta de la situación y de que está tomando decisiones o actitudes que no desea. Al ofrecer esta potente herramienta para su autoestima es más sencillo que reaccione y que empiece a poner límites.
Cómo ayudar a una persona que está siendo manipulada
Hemos visto algunas pautas para fomentar que una persona que está siendo manipulada pueda abrir los ojos y alejarse de esa situación. Pero, ¿qué hacer mientras tanto?, ¿cómo podemos ayudarla cuando está siendo persuadida por otros? Hay determinadas actitudes que puedes tomar para acompañar a la persona que quieres y para ayudarla en este momento. Son las que te mostramos a continuación.
Respeto
Una persona que está siendo manipulada ya sufre, de alguna forma, una falta de respeto constante por ser instrumentalizada. Decir que se está dejando manipular, que no se entera de nada y no respetar sus emociones o decisiones solo puede empeorar la situación. Lo mejor que puedes hacer es mantener el respeto que tienes por ella y aconsejar desde esa perspectiva, sin menospreciar su capacidad de resolverse.
Apoyo
De la mano del respeto va el apoyo. No estar de acuerdo con alguien y seguir a su lado es una muestra de amistad o afecto importante, también de respeto. Dejar a la deriva a alguien que está siendo manipulado no ayudará en absoluto. Esto parece una obviedad, pero hay circunstancias en las que pensamos que dejando a la persona de lado se dará cuenta por sí sola de que está perdiendo afectos por culpa de un tercero y reaccionará: nada más lejos de la realidad. Solo hacemos que se sienta más sola y que considere al manipulador como su mejor apoyo.
Sin presiones
Otra reacción habitual es personar a una persona que está siendo manipulada para que se dé cuenta y elimine al manipulador de su vida. Sin embargo, ya tiene bastantes presiones en este momento, así que echar más leña al fuego no es la mejor actitud que puedes abordar. Con apoyo, paciencia y cariño, puedes conseguir mucho más.
Ayuda en la comunicación
Sentir que no podemos hablar con otros o expresar nuestras opiniones es algo que nos puede llevar a ser manipulados, especialmente cuando el embaucador nos hace sentir esa falsa confianza. Una buena forma de ayudar a la persona que es víctima es fomentar su comunicación e invitarla a expresar sus emociones. No solo será de agradecer, también puede hacer que empiece a poner límites frente a determinadas persuasiones.
Escucha activa
Escuchar es clave para generar confianza, para hacer que se sienta un poco mejor y, sobre todo, para que puedas obtener información de lo que está pasando. Si escuchas el punto de vista de la persona manipulada podrás comprender mejor la naturaleza de lo que está ocurriendo y ofrecer buenos consejos. A veces resulta incomprensible descubrir que alguien que nos parece muy fuerte esté siendo influenciado por un tercero, pero con la escucha activa todo puede llegar a encajar.
Los límites
Con el apoyo en la comunicación y otras herramientas puedes conseguir algo importante: ayudar a que esta persona ponga límites al manipulador. Es algo que requiere también un trabajo sobre su autoestima, su empoderamiento o sus propios miedos personales. Si acompañas en este viaje tan complicado, puedes ayudar a cambiar mucho su situación.